Un trauma emocional es un acontecimiento amenazante, brusco e inesperado o repetitivo, ante el cual la persona se siente impotente.
En un trauma se bloquean las conexiones entre el hemisferio derecho y el izquierdo, quedando las emociones traumáticas aisladas del resto de la información que procesamos.
Ante un estímulo similar, estas emociones aisladas se dispararán y la persona traumatizada reaccionará con mucha angustia y descontrol.
EMDR es una técnica muy eficiente y de corta duración, que desbloquea estas emociones traumáticas.
EMDR (Eye Movement Desensitation and Reprocessing) se basa en el movimiento bilateral de ambos hemisferios, ayudando a que la infomación del trauma se procese correctamente sin volver a causar dolor ni angustia.
EMDR ayuda a:
Alivio sintomático del dolor emocional o físico.
Eliminar la ansiedad, estrés, miedo y la tensión existencial, pudiendo enfrentarse a situaciones con serenidad y poder personal.
Elimina la causa de las adicciones, tanto a sustancias como a estados emocionales negativos y de codependencia.
Cambiar rápidamente la percepción negativa de las situaciones, de uno mismo y de los demás, quedándose con lo mejor de cada situación y viendo con claridad las oportunidades.
Da a las personas recursos que les permiten dejar de huir de lo que temen para elegir conscientemente lo que desean y hacerlo realidad.
Eliminar el crítico interno que poseemos.
"La esperanza es una felicidad por sí misma y la mayor que el mundo puede darnos" (Samuel Johnson)
